Han pasado cien años del asesinato de Rosa Luxemburgo.
De los intentos revolucionarios del siglo XX y sus variadas vías, poco resta.
Revolución e ideología son hoy, para algunos, términos fuera de moda. Para otros, un recuerdo incómodo.
Mientras tanto, la brecha que separa la riqueza de la pobreza es cada vez más amplia y profunda, cada vez son menos los que se adueñan del trabajo de las mayorías, las guerras siguen enfrentado trabajadores contra trabajadores y millones de personas deambulan por el planeta refugiándose de la barbarie.
“Guerra a la Guerra”
“La Revolución será el día que nadie se imponga a la fuerza”
Rosa no ha muerto.